Miplato te ofrece unos menús semanales a domicilio para personas mayores expresamente diseñados por nuestros nutricionistas para un completo aporte de nutrientes.
Además de por su excelente sabor, nuestros menús para personas mayores se caracterizan por ser bajos en colesterol y contribuir al fortalecimiento del sistema inmunológico.
Una alimentación sana y equilibrada es importante en cualquier etapa de la vida y aún más cuando se llega a la tercera edad, cuando el apetito tiende a disminuir con los consiguientes problemas de salud. A continuación te mostramos las causas y consecuencias de esta falta de apetito y unos útiles consejos acerca de la forma en la que hay que actuar.
Causas de la pérdida del apetito en la tercera edad
Lo primero que hay que dejar claro es que la pérdida del apetito puede surgir en cualquier etapa de la vida por diferentes motivos: problemas psicológicos, intolerancia a algunos alimentos, efectos secundarios de algunos medicamentos, patologías intestinales o hepáticas, etc.
Durante la tercera edad hay que añadir a estas posibles causas la natural disminución de la actividad física y del gasto energético, así como de la percepción de olores y sabores. Los problemas de masticación son también causas muy comunes por los que una persona mayor puede llegar a ingerir menos alimentos de los recomendables.
A nivel social, el aislamiento puede contribuir a la pérdida del apetito, provocando problemas de depresión y abandono de las adecuadas rutinas horarias de las comidas.
Consecuencias de la pérdida del apetito en los mayores
Las consecuencias inmediatas de la pérdida de apetito en los ancianos pueden ser cuadros de desnutrición y deshidratación, pérdidas inadecuadas del peso corporal, bajadas generalizadas de las defensas del sistema inmunológico y sensaciones de fatiga y debilidad.
Una ingesta equilibrada de nutrientes es fundamental en cualquier etapa de la vida, pero en la tercera edad un déficit de los mismos puede tener efectos devastadores para la salud.
Por ejemplo, la falta de proteínas aumenta la retención de líquidos y debilita los músculos, niveles bajos de minerales como el hierro y el magnesio pueden provocar anemias y la carencia de vitaminas está directamente relacionada con problemas de huesos y articulaciones, insomnio, concentración y desorientación.
Alimentos recomendables y no recomendables para mayores
La dieta de las personas mayores debe ser variada, contar con los principales nutrientes y no ser excesivamente calórica.
Verduras y frutas deben estar incluidos en cualquier menú cuando se llega a la tercera edad. Además, es importante que los alimentos que lo integren sea bajo en grasas y en colesterol, como por ejemplo pescados, carnes magras, aves, semillas y frutos secos.
Los lácteos también son importantes por sus efectos positivos en la descalcificación de los huesos, muy habitual en edades avanzadas. Sin embargo, es aconsejable que la leche ingerida sea desnatada y los quesos bajos en calorías.
En cuanto a los alimentos que no se deben incluir en un menú para personas mayores, los menos aconsejables son los horneados y fritos y los que contienen niveles altos de grasas saturadas.
Aunque la hidratación es muy importante, hay que evitar el consumo de bebidas azucaradas y, por supuesto, de alcohol.
Consejos para cuando un anciano no quiera comer
Lo primero que hay que hacer cuando se detecta una pérdida de apetito en un anciano es acudir al médico para que analice las posibles causas y administre los tratamientos oportunos.
En el día a día es aconsejable llevar un registro de los alimentos que ingiere, sus calorías y nutrientes. Como es lógico, hay que intentar que coma platos de su gusto (siempre que sean saludables), presentados de un modo atractivo, en cantidades pequeñas y repartidos en cinco o seis comidas diarias.
No es bueno que la persona mayor esté sola a la hora de comer, acompáñalo, que esté entretenido, que se sienta arropado. Tampoco le metas prisa, que se tome el tiempo que necesite. Si le agobias posiblemente se ponga nervioso y esto puede disminuir aún más su apetito.
Por último, procura que los alimentos sean fácilmente masticables y que no estén excesivamente calientes, ya que podría provocarles dolor en las encías.
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Fundador de Bodegas Mezquita, Miplato.es, Método Gas y CongresosDigitales.com. Mentor en la EOI y Andalucía OpenFuture.